¿Cuándo llega el momento más importante de tu vida? Creo que es cuando cumples dieciocho, esos dieciocho años eternamente esperados que desembocan hacia tu futuro. Elegir que harás con tu vida, donde lo harás, como lo harás; son unas de las miles de cosas que tienes que decidir cuando comienza la cuenta atrás. Muchas veces esos añorados dieciocho se vuelven detestables, odiosos o incluso nos pueden llegar a atormentar. La sensación de que todo aquello que planeaste ocurrirá en breve te pone en una situación de nerviosismo un tanto irremediable, pues no sabes si ocurrirá todo como lo esperabas, si será verdad todo aquello que soñabas…
Y así es, se acercan mis 18 años y la cuenta atrás me está matando a ratos. Entonces ¿qué hago? Me pregunto a mí misma mientras un grito de desesperación se va al abismo; y a la única conclusión a la que llego es que todo dependerá de lo que pasará en este año. Y no quiero pensarlo, no quiero llorar y tampoco darlo por olvidado; quiero centrarme en lo que no he hecho hasta ahora; en dar lo mejor de mí, el último esfuerzo. Pese a ello, día a día pareciera que mis queridos profesores se ponen de acuerdo a atormentarte recordándotelo con una mera y simple sigla, ‘’PAU’’.
Deseadme lo mejor, porque la suerte, no me acompañara en tan corto viaje.